Ya estamos en pleno otoño, la época del año donde los árboles se vuelven muticolores.
Uno de los más llamativos es el Ocozol, quizás más conocido bajo el nombre Liquidámbar, cyuas hojas ahora mismo se tiñen de un rojo profundo, naranjo o amarillo. Lo encontramos en parques, jardines y en las calles. Cuando se fisura su corteza, sale una sustancia resinosa. De ahí su nombre.
La delicada forma de sus hojas, combinada con sus inflorescencias esféricas y con un cielo azul de fondo forman una imagen bellísima.
Tiene una madera dura, pesada y de color marrón rojizo muy importante para la industria de muebles, que puede sustituir la madera de nogal.
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